jueves, 15 de mayo de 2008

Problema Masculino con el Asiento del Inodoro

Para poder describir el tema a exponer me ví en la obligación de describir los tipos de inodoro y los elementos que a mi entender lo componen. Decidí hacer una breve búsqueda en Internet que finalmente me arrojó como resultado que existen inodoros; monobloque (completo), suspendidos, con cisterna de pared (cisterna alta y cisterna baja), con bidet incorporado, placa turca, pedestal, de descarga por arrastre, de palangana, etc, etc.
Sin poder resistirme al chiste fácil, pensé ¨Que cagada, voy a tener que simplificar el asunto¨ y decidí sintetizarlo de la siguiente manera.

El que tiene el tanque (conocido también como mochila) apoyado sobre el mismo inodoro es el que me interesa que focalicen. No importa si el botón está al costado, si tiene un botón para lo primero y otro para lo segundo, o si es ese que se tira de una manija para arriba. Lo importante es la mochila y el espacio que la misma ocupa.
En segundo lugar convengamos (sin entrar en detalles) que el inodoro consta de una tapa, y también del asiento. Nuevamente no importa el material, si el asiento, conocido también como anillo, es un ovalo cerrado o abierto en su parte delantera, lo importante es que tengan presente entonces, Asiento e Inodoro con ¨mochila¨.
Imagino que en mayor o menor medida, tanto hombres como mujeres, están al tanto de la dificultad masculina para orinar dentro del inodoro…Aclaro acá que después de muchos años de trabajo intelectual he logrado diferenciarme del gran porcentaje de los varones que me he enterado que….

a) Orinan sin importar como estén tapa y asiento, vertiendo casi todo su orina sobre el inodoro o sus alrededores.

b) Orinan con la tapa levantada, pero el asiento bajo intentando no mojar el asiento.

c) Orinan sentados (levantando previamente la tapa) poniendo como excusa que una revista médica dice que es bueno para la próstata.

d) Orinan en el lavabo y evitan cualquier molestia con la tapa

e) Orinan en la bañadera, especialmente por la mañana cuando ¨sufren¨ del fenómeno conocido como erección matutina.

Como contaba, yo he logrado aprender a levantar la tapa y el asiento para luego orinar. Con los años he conseguido que la mayoría de las veces toda la orina caiga dentro del inodoro, y luego (por favor mujeres no se desmayen) la mayoría de las veces recuerdo bajar el asiento. (Obviamente siempre habrá mujeres que al bajar también la tapa se quejan, y otras que prefieren ambos accesorios bajados).
Pero mi intención no es vanagloriarme por mis destrezas bañeriles, sino hacer pública una queja y advertir a la población tanto masculina como femenina. Resulta que hay algunas marcas y/o modelos de inodoros que no han tenido en cuenta este problema y han diseñado la mochila de tal forma que, si bien la tapa abre perfectamente, el asiento no queda levantado! Tal vez lo diseño una mujer como sistema de ¨bajado automático del asiento¨? No se cual será el motivo de tal terrible y casi fatal error, pero si les digo que es inaceptable. Para todas las mujeres, y para los hombres identificados en los puntos a) – e) paso a explicarles porque:

a) En general es más cómodo tener ambas manos a disposición en ese momento.

b) Estar sosteniendo el asiento, dependiendo de la distribución del baño y la profundidad del inodoro, puede tornarse una situación casi imposible si uno quiere cumplir decorosamente con su tarea.

c) Algunos asientos ¨traicioneros¨ aparentan no moverse, para luego en medio de la tarea caer sobre el inodoro generando:

a. Una interrupción sumamente molesta del momento de liberación de orina

b. Un desastre en caso de no llegar a concretar la interrupción del punto anterior

d) Cuando el baño no tiene traba (llave) uno debe disponer de una pierna para bloquear la puerta de entrada (si la distancia lo permite). Una mano esta ocupada en su tarea habitual al momento de orinar, y la otra simplemente no puede o no llega a sostener el asiento.

e) La combinación de c) y d) es simplemente un calvario.

Dicho esto, solo me resta instar a todos los diseñadores, vendedores, compradores y usuarios de inodoros a no permitir que este mal siga propagándose.
Gracias.

martes, 6 de mayo de 2008

Vulnerable

Algunas veces me siento tan vulnerable físicamente que me duelen las plantas de los pies con cada paso que doy. Entonces me digo:

- ¨Bien! Estás sintiendo el milagro de estar vivo, la perfecta ingeniería de la naturaleza y el ser humano, celebrá tu bienestar y el de los tuyos!¨

Lo intento, pero no puedo. Solo me siento vulnerable.